En esta ruta vamos a seguir prácticamente todo el sendero marcado por el PR-TE 24, cruzándose con el PR-TE 22 y el PR-TE 30.
Comenzamos la ruta en Nogueruelas, dirigiéndonos por la parte baja del pueblo partiendo de la fuente de los tres caños, para cruzar la carretera.
El camino nos lleva por una pista que abandonaremos por un desvío a nuestra izquierda.
Poco a poco vamos ganando altura y dejando atrás varias masías y parideras en ruinas. Tras un rato de marcha por senda, cruzamos el Barranco del Zarzal. Seguiremos hasta un collado, desviándonos varias veces, para siguiendo la senda descender por un interesante pinar, (EL CUAL ESTA PLAGADITO DE ORUGAS), hacia un amplio collado y masada llamada del CUARTO.
Seguimos la senda que nos va introduciendo en la parte mas estrecha del barranco donde encontraremos las Manaderas de Val de Azoo y por debajo de ella ya en el lecho, unas pequeñas pozas, un lugar bonito y refrescante,” pero se nos pone a llover y no hay que entretenerse mucho”. Seguimos la senda volviendo a la pista para coger en sentido descendente para atravesar el lecho del barranco, el mismo de las Manaderas y subir la pista que atraviesa las masadas de Val de Azoo.
A unos 2 km. nos encontraremos con el corral del Plano. Cerca de ahí toca ya comer y reponer fuerzas, pero es corta la estancia porque se va acercando unas cuantas nubes muy negras y el descargue parece que puede ser considerable, “vuelve ha llover”, aun parece que nos queda un buen tramo por recorrer, estaremos a poco mas de la mitad del recorrido.
Pasaremos por el alto de la Pila de 1321 m., para cruzar el Barranco de los Berros y subir a la Rocha de la Muela donde se encuentra un repetidor de TV. Desde ahí se tiene una buena panorámica de Nogueruelas, pero aun no se ha acabado, esto es interminable.
Descenderemos por un pequeño Barranco que cambia a senda y luego a pista, donde llegamos a una cascada que se forma por las lluvias intensas. Siguiendo el margen derecho del río y siguiendo el camino entre campos y huertos, cruzamos la carretera ¡ por fin llegamos a Nogueruelas!. RECORRIDO 21,6 KM.- HORA DE COMIENZO 10,30 HORAS MAÑANA-LLEGADA 18,40 TARDE CON 30 MINUTOS DE COMIDA.
El camino nos lleva por una pista que abandonaremos por un desvío a nuestra izquierda.
Poco a poco vamos ganando altura y dejando atrás varias masías y parideras en ruinas. Tras un rato de marcha por senda, cruzamos el Barranco del Zarzal. Seguiremos hasta un collado, desviándonos varias veces, para siguiendo la senda descender por un interesante pinar, (EL CUAL ESTA PLAGADITO DE ORUGAS), hacia un amplio collado y masada llamada del CUARTO.
Seguimos la senda que nos va introduciendo en la parte mas estrecha del barranco donde encontraremos las Manaderas de Val de Azoo y por debajo de ella ya en el lecho, unas pequeñas pozas, un lugar bonito y refrescante,” pero se nos pone a llover y no hay que entretenerse mucho”. Seguimos la senda volviendo a la pista para coger en sentido descendente para atravesar el lecho del barranco, el mismo de las Manaderas y subir la pista que atraviesa las masadas de Val de Azoo.
A unos 2 km. nos encontraremos con el corral del Plano. Cerca de ahí toca ya comer y reponer fuerzas, pero es corta la estancia porque se va acercando unas cuantas nubes muy negras y el descargue parece que puede ser considerable, “vuelve ha llover”, aun parece que nos queda un buen tramo por recorrer, estaremos a poco mas de la mitad del recorrido.
Pasaremos por el alto de la Pila de 1321 m., para cruzar el Barranco de los Berros y subir a la Rocha de la Muela donde se encuentra un repetidor de TV. Desde ahí se tiene una buena panorámica de Nogueruelas, pero aun no se ha acabado, esto es interminable.
Descenderemos por un pequeño Barranco que cambia a senda y luego a pista, donde llegamos a una cascada que se forma por las lluvias intensas. Siguiendo el margen derecho del río y siguiendo el camino entre campos y huertos, cruzamos la carretera ¡ por fin llegamos a Nogueruelas!. RECORRIDO 21,6 KM.- HORA DE COMIENZO 10,30 HORAS MAÑANA-LLEGADA 18,40 TARDE CON 30 MINUTOS DE COMIDA.
Las cascadas de agua fueron preciosas y no nos las esperábamos.